Elizabeth Gaskell nació en Londres en 1810. Al fallecer su madre, fue educada por una tía en el pueblecito de Knutsford, en un ambiente de pequeña nobleza rural venida a menos que ella más tarde describiría con afecto en Cranford, la más popular de sus novelas. En 1832 contrajo matrimonio con William Gaskell, ministro de la Iglesia Unitaria inglesa, y la pareja se estableció en Manchester, en aquellos momentos una ciudad superpoblada y socialmente conflictiva, en los inicios de la Revolución Industrial. Durante unos años, Elizabeth Gaskell se dedicó por completo a su familia –el matrimonio tuvo seis hijos- y a las obras de caridad propias de la esposa de un pastor. No empezó su carrera literaria hasta 1845, empujada por la depresión que le produjo la temprana muerte de su único hijo varón.
En 1848 apareció su primera novela, Mary Barton, que obtuvo un éxito inmediato. Como resultado, Dickens le propuso convertirse en colaboradora regular de su periódico Household Worlds, donde se publicarían los primeros capítulos de Cranford (1853). En 1857 apareció la Vida de Charlotte Brontë, sin duda una de las biografías más destacadas del siglo XIX inglés. Durante toda su vida, Gaskell alternó las obras que reflejan sus preocupaciones sociales y morales –Ruth (1853), Norte y Sur (1855)- con novelas de tono más intimista, como Sylvia’s Lovers (1863) o Hijas y esposas (1864-66), que dejaría inacabada a su muerte, ocurrida el 12 de noviembre de 1865.